Editorial: Ekaré
Los 7 ratones empiezan a mirar cada uno por un lado lo que se habían encontrado cerca de su laguna, era algo muy raro. Cada ratón se choca con un lado de la cosa (era un elefante pero no lo sabían) y les parece distintas cosas: la pata parecía una columna, la cola parecía una serpiente...Al final el ratón blanco descubre que la cosa rara es un ¡ELEFANTE!
Las ilustraciones de este cuento no son muy apropiadas para los niños pequeños, ya que utiliza muchos colores oscuros; pero a su vez resalta los coloridos colores de los ratones, que son los protagonistas. Los dibujos ocupan la parte central de la página, y el fondo que utiliza es el negro para resaltar los dibujos de los animales y cosas. Son dibujos que los niños están habituados a ver.
El texto es apropiado en cuanto a lo que se ve en las ilustraciones y la letra es una letra fácil de leer para los niños que se inician en la lectoescritura.
El cuento tiene una estructura repetitiva, cada ratón acude a mirar una parte distinta del objeto y finalmente se enumeran todos los objetos que les han parecido a cada uno. Con este cuento se pueden trabajar los colores, ya que destacan los colores primarios y secundarios.
Escrito por:
Ester Torres Rebollo
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